Indicação do Octeto: ‘Iceman, el antihéroe’

Opinión: ‘Iceman, el antihéroe’ 

Por Suomijon 

A menudo el cine y los comics nos han presentado a ciertos personajes capaces de llevar a cabo acciones extraordinarias. Modelos a seguir en todas las facetas que conforman tanto la persona como el personaje. Héroes sin ninguna fisura con comportamientos ejemplares en todo aquello que hacen o dicen. La ficción, así como la realidad, se ha encargado de diversificar el abanico de héroes y ha creado a otro tipo de sujetos, cuya integridad, ética o moral no es tan ejemplar pero a menudo se identifica más con el de las masas a las que va dirigida.

Raikkonen es un héroe a su manera, sigue sus propios códigos, y ha creado su propio espacio en la F1 actual, muy encorsetada y dispuesta a ser modelo de conductas y actitudes, donde las marcas y el poder establecido buscan como objetivo pilotos asépticos, superficiales, políticamente correctos y capaces de transmitir una imagen de ‘buenismo’ que a menudo no se corresponde con la realidad.

Kimi es un piloto con un talento enorme, un competidor muy cualificado que ha pasado por algunos de los equipos más relevantes de la F1, incluso hizo una incursión en el campeonato del WRC y ha sido capaz de volver y recuperar su carrera, incluso en un punto mejor del que la dejó.

Las actitudes del finlandés no son a menudo muy bien entendidas por buena parte del stablishment, pero nadie se atreve a cuestionarlas, porque cada vez que Kimi se monta en su coche hace un trabajo profesional y más que correcto. Es tan excepcional su caso, que en lugar de haberse tenido que adaptar al entorno de la F1, parece haber sido a la inversa y es el mundillo de la competición el que ha aceptado las normas que impone Raikkonen.

Campeón en 2007 en unas condiciones muy particulares, cuando todo parecía perdido, remontó una sustancial ventaja para proclamarse vencedor por delante de los dos pilotos que se habían apropiado de todo el protagonismo a lo largo de la temporada. La última carrera, el GP de Brasil, tuvo por momentos a tres distintos campeones virtuales, sin embargo fue Kimi quien en última instancia se hizo con un épico triunfo que le dio el título.

Kimi Matias Raikkonen, no proyecta la imagen de un gran campeón de F1, introvertido, parco en palabras, con un lenguaje corporal que huye de los triunfalismos de los habituales y enormes egos de los que hacen gala quienes han obtenido las mieles del éxito en la competición. Es un tipo llano y sereno, incluso en las situaciones adversas en las que cualquier mortal mostraría su ira o desencanto, se presenta con total naturalidad.

La afición a la F1 adora a Raikkonen porque se siente más identificada con un tipo convencional que hace un gran trabajo y no deja de ser una persona normal, con sus virtudes y sus defectos, sus grandezas y sus miserias, pero al que admiran millones de personas llenas de virtudes y defectos a lo largo de todo el planeta, por simpatía.

Los héroes a menudo son de mentira. Iceman, nuestro antihéroe, es de carne y hueso. Un excepcional piloto de F1 que será recordado por su particular forma de ser, Tanto o más que por sus logros en la competición.

Fonte: http://www.magazineracing.com  - Dica: Kimi Raikkonen - Iceman (Facebook)

Em meio a tantos textos que só falam de crise e problemas financeiros quando o assunto é Kimi Räikkönen, descobrir este texto foi como achar um oásis no meio do deserto. #amei

Beijinhos, Ludy